Hoy nos despertamos con una nueva orden del rey
Nabucodonosor. Al salir de las habitaciones había en el patio una estatua y cada
vez que sonaba una música teníamos qué inclinarnos ante ella.
El no hacerlo a algunos casi les cuesta entrar en un gran horno lleno de fuego.
Fuimos a jugar al "ULTIMATE", gran deporte babilónico ;)
Como científicos decidimos
estudiar qué pasaría si se metiese una persona en un horno de fuego. Hicimos
varios experimentos y lo que aprendimos el otro día en el campo de bomberos
también nos valió de mucho.
Probamos con diferentes materiales y descubrimos que el fuego tiene temperaturas tremendamente altas.
Menos mal que Dios puede librar a los hombres de cualquier cosa incluso de quemarse en el fuego como le pasó a Mesac, Sadrac y Abed-nego.
Hicimos un entrenamiento acuático para saber cómo apagar
cualquier fuego. En la competición teníamos que conseguir la mayor cantidad posible
de agua para apagar el fuego.
Cada uno usó su agua y unas super pistolas para apagar el fuego jejeje ^_^
Seguimos practicando un poco más con el agua: hoy en la piscina!
Nabucodonosor desobedeció a Dios y él cumplió su promesa: le
quitó el trono y lo condenó a vagar por el bosque como un animal. Tuvimos que
hacer una salida nocturna para buscar al rey por los bosques y después de un largo tiempo
ya era el momento de que regresase al trono de Babilonia. Esperamos que el rey
Nabucodonosor aprendiese la lección.
¡MAÑANA MÁS Y MEJOR!
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